Los problemas con la familia política

"Familia política" tipo, en este caso valenciana

Es bien sabido que en las "familias políticas" no es oro todo lo reluce. Al contrario, hay mucha quincalla y bisutería. Suegros, yernos, nueras, cuñados y los llamados primos y tíos políticos, conviven y malviven dentro de la familia donde el roce… más que hacer el cariño, levanta ampollas.

Suegros controladores, yernos despegados o cuñados espabilados pueden hacer que la convivencia dentro de la familia política sea un infierno. Pero bien llevada, una familia política es la mejor opción para medrar y prosperar. Dentro de ella vas a encontrar apoyo, trabajo, contratos y favores. Te pueden arreglar la vida.

Pero no todo es perfecto… cuando comienzan los problemas la familia política sufre un proceso de desestructuración, pierde cohesión y cada miembro intenta su propia salvación. La falta de lazos sanguíneos, cariño desinteresado y amor fraternal, son precisamente el defecto de este tipo de familia. En este caso, te pueden destrozar la vida.

Si estas integrado dentro de una familia política, no bajes nunca la guardia. Lo que hoy es amor mañana será odio, el apoyo incondicional se convertirá en indiferencia y el dinero se transmutará en cárcel. Graba todas las conversaciones que puedas, en un futuro puede ser un billete para pactar con la Fiscalía y mostrar tu arrepentimiento.

A todos nos han hablado de las “amistades peligrosas”… pero no nos han advertido sobre las “familias políticas” (*).


(*) Tener una “familia política” decente, es tu responsabilidad. Que sea "honorable" ya no es suficiente.